viernes, 22 de julio de 2011

Hasta luego



 "Consolación", E.Munch





Este adiós, no maquilla un "hasta luego",
este nunca, no esconde un "ojalá",
estas cenizas, no juegan con fuego,
este ciego, no mira para atrás.


                                                        J.Sabina





domingo, 10 de julio de 2011

Carrera de fondo


Edvard Munch. "Despair", 1893




From childhood’s hour I have not been
As others were; I have not seen
As others saw; I could not bring
My passions from a common spring.
From the same source I have not taken
My sorrow; I could not awaken
My heart to joy at the same tone;
And all I loved, I loved alone.
Then- in my childhood, in the dawn
Of a most stormy life- was drawn
From every depth of good and ill
The mystery which binds me still:
From the torrent, or the fountain,
From the red cliff of the mountain,
From the sun that round me rolled
In its autumn tint of gold,
From the lightning in the sky
As it passed me flying by,
From the thunder and the storm,
And the cloud that took the form
(When the rest of Heaven was blue)
Of a demon in my view.


                                                    "Alone", Edgar Allan Poe






Cada mañana
salgo de mi bien comunicada
ratonera.
Ojos color sangre,
piel de porcelana
cual vampiro de mis viejos
libros.
Sin sexo,
sin abrazos,
con mi fe en un reloj de
arena.
Estático,
lunático,
en mitad de la vía
y observando...
Observando las nubes,
el tatuaje de tu espalda,
mi pánico en el aire.
Observando a los gigantes,
el rojo de los buses,
el modo en que se monta
esta ciudad sin fin.
Observando las dudas,
las gotas en el cristal,
las cámaras curiosas
que te privan de intimidad.
Observando de cerca
como te vas bien lejos,
sin remedio ni cordura,
deshilando los retales
de todo mi equilibrio.





Sombrero de paja,
la luna es luz de grúa
bajo la noche londinense.
El signo de los tiempos
dibuja un break feliz
en todos los rostros
que contemplas por la calle,
incluido el tuyo.
El dolor ya no existe,
las guerras acabaron,
¡es tan dulce el transitar
entre tanta bebida edulcorada!
Di adiós a tus agujeros,
pues el cocktail voraz
de sidra y compañías
te dan el punto y aparte
que andabas buscando.



Poco se compara
al embrujo de un piano callejero,
a la ausencia de ruidos
que dinamitan la serenidad.
Sobran las palabras
al pie de este templete
en mitad de la nada
metropolitana,
donde todo parece
un sueño sin importancia,
donde se permite volar
a todas las tierras sin miedo,
a todos los mundos menos éste.